Tal vez en estas vacaciones tuvimos la fortuna de visitar alguna playa. Si no fue así, evoquemos esos días en medio del estruendo o la tranquilidad de las olas.
1. ¿Qué sientes frente al mar? ¿Qué emociones experimentas ante aquel universo infinito?
2. Piensa en el viento, en la arena, en las aves; evoca cada uno de sus sonidos. Desde el fondo de ese paisaje inacabable ¿te brindan gozo, te perturban? ¿Hay algún tipo de estremecimiento?
3. ¿Qué te dice el caos inesperado en que se convierten las olas? ¿qué sus sombras, sus vacíos?
4. Las olas, en perpetuo movimiento ¿qué se llevan, qué vuelven? ¿qué su agua limpia o turbia? ¿Pueden representar anhelos, sueños, frustraciones; los nombres de quienes amamos, odiamos; de quienes dejaron en mitad del pecho o del vientre una herida?
5. El mar ¿puede ser un espejo?
6. Y qué pensamos de su devastación.
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